La Naranja es una fruta con historia propia con
más de 20 millones de años de antigüedad de los primeros cítricos: desde sus
orígenes en el sudeste asiático, pasando por la mitología griega y su
propagación de oriente a occidente.
El naranjo dulce procede de las
regiones surorientales de Asia, en concreto de la zona sureste de China y el
archipiélago malayo. La cita más antigua procede de China y pertenece al Libro
de la Historia (s. V a. de C.). No es hasta el s. IV a. de C. cuando el
escritor griego Teofrasto en su obra Historia de las plantas alude al cidro,
especie conocida en Persia a la que denomina manzana médica por sus propiedades
medicinales y aromáticas. Su cultivo se realiza en el Sur de China desde hace
miles de años, desde donde se extendió por todo el Sudeste asiático.
Posteriormente, se expandió tanto el naranjo dulce como el naranjo amargo por
todo Oriente por la Ruta de la Seda.
Según los diferentes autores su
expansión se debe para algunos a Egipto, otros se la atribuyen a Grecia, otros
argumentan un posible origen de los agrios en Mesopotamia, compartido por
Palestina, y por último, Arabia. Se reconoce por unanimidad la existencia en el
Imperio Romano de escritos que indican las características, cultivo y
propiedades del cidro. Y en la cultura griega se describen las cualidades
medicinales del fruto y semilla de la naranja. Pero fueron los árabes los que
nos legaron mayor información sobre los naranjos en múltiples tratados y
estudios. Introdujeron el naranjo amargo en Europa por el sur de España en el
siglo X, sin embargo, el naranjo dulce no comenzó a cultivarse hasta los siglos
XV-XVI. Los árabes la denominaron naranche, nombre derivado del término arangus
con el que los persas se referían a esta fruta.
En la segunda mitad del siglo
XIX se descubrió en Bahía (Brasil) una naranja que era más dulce, jugosa y
hermosa, sin pepitas y con un ombligo en el extremo opuesto al pedúnculo. Fue
llevada a California, donde se convirtió años más tarde en la reina de las
naranjas, la variedad conocida hoy como Navel Washington. El cultivo de los
cítricos se extendió desde Europa a Estados Unidos, donde hay áreas de cultivo
florecientes en Florida y California; a Sudamérica, donde Brasil disfruta de la
cuota más alta en el mercado mundial de naranjas y zumo de naranjas; a
Sudáfrica y a ciertas partes de Australia. Actualmente, el naranjo es uno de
los frutales más extendidos por todo el mundo, siendo los principales países
productores: Brasil, Estados Unidos, España (Valencia, Murcia, Sevilla y
Huelva), Italia, México, India, Israel, Argentina y China.
